Profesores de todo Chile asistieron a taller de indagación y evolución en Congreso de la Sociedad Chilena de Educación Científica (SChEC)

Bajo el lema “Educación en ciencias para la justicia social”, el encuentro que se realizó, entre el 7 y 9 de noviembre, en la ciudad de Chillán reunió a especialistas nacionales e internacionales en torno a la investigación, la innovación y las prácticas pedagógicas que se desarrollan en el área de la educación científica, con el fin de vincular a estudiantes de educación superior, académicos, investigadores y profesores de ciencias del sistema escolar.

En esta oportunidad, la Universidad del Bío-Bío fue anfitriona en todas las actividades de esta tercera versión del encuentro; además, ofreció el espacio necesario para que se efectuara un Cabildo abierto enmarcado en el tema de la educación en ciencias, con el objetivo de dialogar acerca de un nuevo pacto que compromete las actuales demandas por justicia social en nuestro país, en el cual participaron los académicos de NOS y Evolución.

Durante tres días, quienes asistieron al congreso compartieron sus distintas visiones acerca de educación científica. Fueron alrededor de 167 trabajos los aceptados para ser expuestos, en cuatro tipos de modalidades: relatos pedagógicos, ponencias de innovación, ponencias de investigación y posters. Además, el programa de actividades contempló el tercer día del Congreso SChEC 2019, una serie de talleres temáticos, uno de los cuales fue: “Enseñanza de la Evolución en el contexto de ciencias para la ciudadanía”, a cargo del Dr. Hernán Cofré y la Mg. Paola Núñez, ambos académicos asociados al proyecto Fondecyt Regular (2018 – 2020) Nº 1181801.

Tal como se realizó en Concepción en octubre del año 2018, y en La Serena y Santiago este año, se ofrecieron distintas actividades para trabajar algunos contenidos de la evolución biológica, destacando diversas características, por ejemplo: el desarrollo de habilidades de pensamiento científico, el uso de la indagación como estrategia de enseñanza a través de la recolección de datos, la revisión de temas cercanos a las personas como es la evolución humana, el uso de material concreto y la reflexión de como la evolución impacta en nuestra vida diaria.

Para Alejandro Rosas, profesor de biología del colegio Aurora de Chile de Chiguayante, este taller fue una experiencia merecedora de nota siete. Punto uno, dice él, “por la vinculación que genera con la práctica científica real. Punto dos: por el tratamiento pedagógico que se le dio al tema de la evolución, ya que aquí, claramente hay un trabajo de indagación involucrado, con habilidades que se requieren para desarrollar con los estudiantes. En tercer lugar, se trabajó con materiales muy atingentes, porque estamos hablando de réplicas fidedignas de fósiles. Tanto las láminas como los modelos facilitan una labor mucho más rica para la formación científica”.

Uno de los aspectos que más llamó la atención del profesor Alejandro, fue la metodología que se aplicó. “La originalidad es un desafío o la forma de trabajar con elementos científicos, es algo que a uno no se le ocurre, porque uno no es científico y esa es la genialidad de poder vincularlo sin ser algo sofisticado, pero haciéndolo educable”.

Por su parte, Karina Olivares Román, profesora del Complejo Educacional Clara Solovera de la comuna del El Quisco, señala que es primera vez que asiste a un taller sobre evolución. Confiesa haberse interesado de participar, porque es “uno de mis temas predilectos dentro de esta disciplina. Realicé mi portafolio de evaluación docente en la enseñanza de la evolución en tercero medio y mi tesis de pregrado también estuvo, en parte, vinculada a esta área”.

Para Karina fue muy provechoso colocarse en el papel del estudiante por unos minutos. “Con mi grupo de trabajo, nos costó definir una pregunta, una hipótesis y la metodología de medición, pese a que todos somos especialistas en biología. Esta experiencia me sirvió para darme cuenta, y entender por qué para mis estudiantes resulta complejo lograr estas habilidades y espero poder guiarlos de una mejor manera en una próxima ocasión”.  Además, agrega que le gustaría poder aplicar algunas herramientas de este taller, “en primero medio, el próximo año. Tal vez con un trabajo similar sobre la base de imágenes, ya que me imagino que los cráneos deben ser difíciles de conseguir”.

Marco Araya Cubillos, quien es biólogo de formación inicial, estudió pedagogía en biología en la Pontificia Universidad Católica de Chile (PUC), actualmente trabaja en el Centro de Investigación Avanzada en Educación en la Universidad de Chile y en Desarrollo Profesional Docente en el programa PENTA-UC, afirma que con las actividades expuestas en este taller pudo ver que hay varias formas de presentar las evidencias, “de hecho el profesor Cofré nos mostró el trabajo con cráneos y con imágenes para cuando no se disponga de ese recurso. Pero, por otro lado, algo que para mí fue muy ilustrativo, presentó las huellas y lo hizo como una extensión de lo que estábamos trabajando. Esto nos permitió trabajar con evidencia en torno a un tópico más o menos común, entonces, lo que espero yo es tener ahora la habilidad de llevar esto que trabajamos en humanos, a lo que pasa en células y generar actividades que permitan a los estudiantes ir y volver de cosas más macro a cosas más micro”.

Preguntado por la relevancia de realizar este tipo de actividades relacionas con la evolución, Marco dice: “Yo diría que la evolución es un fenómeno que se puede observar y analizar muchas escalas diferentes, desde los profesores que están especializados en biología celular y molecular, hasta los que se especializan en ecología de comunidades. Todos deberíamos encontrar una forma de abordarlo y llevarlo al aula. Incluso, puede ser una herramienta versátil para abordar diferentes contenidos, porque la evolución es algo que trasciende y que podría tener cabida en distintas unidades”, comenta Marco.

Finalmente, es importante señalar que, conforme a los estatutos de la SChEC, se aprovechó la oportunidad del congreso para realizar la elección de su directiva, correspondiente al periodo 2020-2021, dentro de la cual el investigador de NOS y Evolución, Hernán Cofré Mardones (PUCV) formará parte como vice-presidente. ¡Felicitaciones!

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